Novelas Ya
  • Todas las novelas
  • En Curso
  • Completadas
Avanzado
Iniciar sesión Registrarse
  • Todas las novelas
  • En Curso
  • Completadas
  • Urbano
  • Fantasía
  • Romance
  • Oriental
  • General
Iniciar sesión Registrarse
  1. Inicio
  2. La Reclamación Virgen de la Bestia
  3. Capítulo 205 - Capítulo 205: Sorpresa - Parte【4】
Anterior
Siguiente

Capítulo 205: Sorpresa – Parte【4】

—Hermosa —susurra roncamente mientras su aliento ardiente acaricia mis labios temblorosos.

—Tea —gruñe con irritación porque sabe exactamente lo que estoy haciendo.

—La paciencia es una virtud, Fobos. ¿No me enseñaste eso?

—Ven aquí —su voz es gutural, llena de una inmensa codicia por estar dentro de mí, por sentir las apretadas y empapadas, pero abrasadoras paredes de mi coño apretándose alrededor de su polla, ordeñándolo hasta secarlo.

—Después de que recibas tu segundo regalo —río y doy más pasos hacia atrás mientras él intenta lanzarse hacia mí para saltar.

—¿Es esto un lienzo? —me agacho a recoger su siguiente regalo y se lo ofrezco mientras su expresión facial se contorsiona en una de desconcierto con un profundo ceño fruncido entre sus cejas mientras examina la tela tejida llanamente que está cubierta con un paño blanco.

—En efecto, es tu segundo regalo. Realmente disfruté creando esta pieza, es mi favorita, Fobos. Espero que puedas sentir mi amor infinito por ti —susurro entrelazando mis dedos con anticipación mientras él quita el paño dejando al descubierto el lienzo seco a sus intensos ojos azul océano.

—Esto es… esto es —los ojos de mi macho se agrandan de asombro mientras lo estudia, su mandíbula se tensa mientras sus emociones dentro de él se agitan en reacción a la pintura.

—Somos tú y yo frente a nuestro árbol, ¿he dibujado bien tus rasgos juveniles? —he pintado una gran imagen de Fobos y yo de cuando éramos más jóvenes. Es de nuestras caras riendo mientras estábamos sentados junto a nuestro árbol en los jardines del castillo bajo los rayos del cálido sol, un lugar donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo.

—Drahá —esto es todo lo que puede responderme mientras sus ojos brillan con sentimientos mientras mira hacia abajo el lienzo, sosteniéndolo muy delicadamente como si ya tuviera un lugar especial en su corazón.

—Fue el comienzo de nuestro viaje, Fobos. Fuimos guiados por la luna, no todos pueden ser amigos de infancia con sus compañeros mientras crecen. Ese jardín, ese árbol, el castillo, atesoro cada recuerdo que formamos ahí con la totalidad de mi corazón.

—¿Entonces deseas que reclame la mitad del castillo de Deimos?

—¿Mitad del castillo? ¿A qué te refieres? —pregunto confundida.

—Ese castillo pertenece a ambos, a Deimos y a mí. El ala este está bajo mi nombre, pero nunca me interesó ese lugar porque no tenía importancia para mí, no tanto como nuestras tierras de la manada. Pero mirando esto, veo cuánto significa ese lugar para ti. Y puesto que lo adoras tanto, lo reclamaré. Si deseas, puedes construir una segunda casa allí —dijo—. ¿El ala este? Era donde estaba la antigua habitación de Fobos. Recuerdo el ala este, era bastante oscura y espeluznante, pero también serena. Era un espacio amplio que sumaba numerosas habitaciones vacías.

—¿Harías esto por mí?

—Cualquier cosa por ti. Solo dí la palabra y llamaré a Deimos esta noche —respondió.

—¿Él no se molestaría? —preguntó ella.

—Por supuesto que no, somos hermanos. Y aunque la tierra en la que está construido el castillo es suya, el castillo en sí no le pertenece completamente. Nuestros padres lo repartieron entre ambos y parece que tú lo deseas —explicó.

—Yo… lo deseo. Nuestros cachorros podrían tener sus propias habitaciones allí cada vez que vamos a visitar y sería agradable quedarnos un tiempo en el castillo como una familia —articuló.

—Entonces, así será. Reclamaré el ala este esta noche y puedes hacer lo que quieras con las habitaciones vacías. Estoy seguro de que Lumina estaría encantada si le informaras de tus planes —sonrió tiernamente ante su falta de reluctancia para proporcionarme cualquier cosa que demande.

—¿Sabes en qué estaba pensando, Fobos?

—¿Qué? —me insta con una inclinación sutil de su cabeza mostrándome que está escuchando.

—¿Qué pasaría si yo también fuera una juvenil? ¿Qué pasaría si tuviera tu edad cuando nos conocimos, no has pensado en cómo las cosas habrían sido muy diferentes entre nosotros en el castillo? —Los orbes de mi macho se iluminan ante mi pregunta, lo que me da mi respuesta. Lo ha pensado… incontables veces.

—Las cosas habrían sido mucho más fáciles para mí… para nosotros —Fobos me ofrece su gran palma callosa que agarro al instante mientras él me conduce hacia su regazo posicionándome por mi cintura de manera que estoy montada sobre él.

—Creo que habría sido emocionante al menos para mí —murmuro mientras mis dientes se clavan en mi labio inferior, mis mejillas se encienden ante su mirada hechizante—. ¿A qué te refieres con más fácil?

—Bueno, como jóvenes ciertamente habríamos estado bajo el control de nuestros padres y no habríamos podido tomar decisiones por nosotros mismos. Cuando digo más fácil, me refiero a más fácil para satisfacer mi enorme apetito —explicó.

—¿Cómo? —pregunto sin aliento mientras él agarra mis caderas curvas levantándome un poco para acomodar mi coño empapado cubierto por un tanga sobre su polla goteante que está golpeando mi entrada. No necesita abrir su boca para explicar nada, la tormenta furiosa en sus ojos me revela su verdad. Habría estado a su merced en todo momento para ser arruinada una y otra vez.

Fuente: Webnovel.com, actualizado en Novelasya.com

Anterior
Siguiente
  • Inicio
  • Contacto
  • Política de privacidad

© 2025 NovelasYa. Todos los derechos reservados

Iniciar sesión

¿Perdiste tu contraseña?

← Volver aNovelas Ya

Registrarse

Regístrate en este sitio.

Iniciar sesión | ¿Perdiste tu contraseña?

← Volver aNovelas Ya

¿Perdiste tu contraseña?

Por favor, introduce tu nombre de usuario o dirección de correo electrónico. Recibirás un enlace para crear una nueva contraseña por correo electrónico.

← Volver aNovelas Ya

Reportar capítulo